Nació Franco!!!!2018

Hola Frida

te cuento de la llegada de Franco a la Familia

A Franco lo esperábamos ansiosos, Lorenza nuestra bebota más grande, Marcelo y yo. Nació el 17 de septiembre a la noche. Ya estábamos terminando la semana 40 y por entrar en la 41.

Finalmente, luego de varios dáis de contracciones, separadas, intermitentes, no regulares... y más agotados de resolver la logística de con quién dejábamos a Lorenza en cada día y posible horario, el lunes a la tarde empecé con contracciones más seguidas.

Lorenza ya estaba al cuidado de unos amigos y dormía ahi.

Así que con mucha decisión y convicción empecé a hacer las ooooo con mucha intensidad y fuerza, empujándo y aprovechando la fuerza de las contracciones, para que empiece finalmente su llegada. En equipo con Marce pasamos tiempo en la pelota de yoga, en baños de inmersión con aromas, masajes en las lumbares, ya me dolía mucho el coxis. Hasta que pasaron dos horas de contracciones regulares, y unas tres cada diez minutos. llamamos a la partera y acordamos encontrarnos en el Sanatorio.

En el camino las contracciones fueron más soportables de lo que esperaba,ya que ahí no iba a poder hacer los ejercicios que venía haciendo.

Llegamos con 8 de dilatación. Instante de wooow buenísimo, y buenísimo que llegamos. La partera estaba ahi, me pasaron a la sala de preparto y entre que entregamos documentacion y me preparé llegó también mi obstetra ... todo fue muy rápido....

A sala de partos, con 10 de dilatacion. Me pidieron que haga fuerza... sí como si tuviera ganas de ir al baño. Eso. A lo que repregunto... que puje? Si, cuando venga. hace fuerza. Seguía convencida de que si hacía fuerza saldría... todavía no estaban ahi ni Marce ni el obstetra. Me dijo la partera, igual tranquila que falta. Cuestión, que no faltaba tanto... un poco de fuerza o concentración en la organización del pujo.. y ya estábamos muy cerca.

Llegaron todos a la Sala y ahí sí, me concentré en la guía de mi obstetra. Un pujo y rompí bolsa. otro pujo y asomó la mitad de la cabeza. Palabras de tranquilidad de mi obstetra... tranquila te estamos cuidando para que no te desgarres ni tengamos que hacerte puntos, vas muy bien. Fue un alivio, porque al no tener peridural esta vez sentía todo (hoy no me lo acuerdo como dolor, no me acuerdo si era dolor, o si era demasiada sensibilidad). Incluso en ese segundo pujo me ofrecieron tocarle la cabecita pero preferí seguir concentrada. Ya venía Fran. Ya lo iba a poner en mi pecho, besarlo, abrazarlo sentir su olorcito y su calorcito. Y así fue, un pujo más y nació. Lloró, lo pusieron en mi pecho, me temblaba hasta el alma, descargue en llanto. Sonreí más todavía que al final de cada pujo.

Fue un parto totalmente respetuoso, así como todos los controles y la espera de que Fran elija el momento.

Lorenza conoció a su hermano al día siguiente, muy felices los cuatro. Ella emocionada y también un poco celosa, tiene sólo un año y diez meses.

Todo fue hermoso. Esta vez no pudimos ir las veces que quisimos al taller pero la vivencia y la ensañanzas quedaron grabadas en nuestros corazones.

Muchas Gracias. Un beso grande