Relato de Leti
El 16 de marzo a las 7 de la mañana me desperté con contracciones, sentí emoción y nervios porque eran diferentes a las que había tenido antes. Ya el día anterior me había sentido diferente, sentía que Valentín estaba haciendo mas presión, estaba mas bajo. En los controles con la obstetra esa semana y la anterior ya tenia 2-3 cm de dilatación.
Esa mañana fui contando contracciones hasta las 9 am cuando desperté a Die para contarle y me comunique con la partera. Como las contracciones eran bastante frecuentes acordamos encontrarnos en el sanatorio al mediodía.
Las contracciones fueron cada vez mas intensas pero las acompañaba con las "O" que me calmaban, Die también las repetía conmigo. En el viaje al sanatorio ya las sentía muy intensas, Die seguía diciendo las "O", tenia mucha necesidad de escucharlo durante las contracciones pero ya no podía emitirlas.
Cuando la partera me revisó me sorprendí, tenia solo 4 cm de dilatación...no era lo que esperaba, también tenia la presión un poco alta por lo cual ya quedo internada.
Previamente había hablado mucho con Die respecto a lo que quería para el nacimiento de Valentín. Quería que fuera un parto vaginal con la menor intervención posible, un parto respetado. El tema es que tenia muchas contracciones para la dilatación que había alcanzado al ingresar así que me recomendaron la anestesia epidural teniendo en cuenta que todavía faltaba y estaba con mucho dolor, me dijeron igual que la decisión era mía. Decidí que lo hicieran. Cuando entró Die después que me revisaron volvió a preguntarme si era lo que realmente quería, teniendo en cuenta que antes pensaba en no hacerlo.
Me di cuenta que podía haberme ahorrado mucha preocupación y tiempo pensando en la planificación del parto. En ese momento me permití hacer lo que quería y podía, fue un alivio muy grande. Después de la anestesia supe que había sido la mejor elección para mi. Seguía en contacto y sintiendo las contracciones pero me alivio no sentir ese dolor.
Die me acompaño todo el tiempo, las horas siguientes pasaron muy rápido, no tenia mucha noción del tiempo.
La obstetra y la partera me decían que Valentín no estaba descendiendo, para ese entonces ya tenia dilatación competa, y que con cada contracción descendía su frecuencia cardíaca. Si no descendía iba a ir a cesárea. Pero yo sentía que él estaba bien así que fue cuestión de un poco mas de tiempo para que descendiera.
Fue raro el momento en que empecé a pujar porque quise hacerlo a mi manera, como me sentí mas cómoda en las clases tuyas, pero ellas querían dirigir el pujo y me dijeron que lo estaba haciendo mal, que no tenia que soltar el aire. Era contradictorio, por un lado continué con el pujo como me decían pero escuchaba las palabras de Die que me decía al oído: -prolonga el coccix y soltá... Elegí concentrarme en esas palabras, en visualizar mi cuerpo abriéndole paso a Valentín, impulsando y ayudándolo a salir. Ya no sabia cuando pujar y cuando no, solo sabia que era importante que naciera y no pasara mucho tiempo. El problema era que tenía la mano delante de su cara y sostenía y apretaba el cordón umbilical con cada contracción.
Después de un tiempo me dijeron que ya estaba coronando, sentí mucha presión, dolor y en unos pujos salio la cabeza, al próximo el resto del cuerpo. Sentí tanto alivio y una felicidad enorme... Lo pusieron en mi pecho mientras lo secaban. Con Die llorábamos, lo besamos mientras él nos miraba tranquilo.
Recuerdo que cuando leí los relatos con experiencias de nacimientos en el libro con bebes que no lloraban al nacer me pareció raro, distinto. El nacimiento de Valentín fue así, sin llorar y con los ojos bien abiertos, contemplando todo. Nació a las 15:57 hs, recién escuche que lloró a lo lejos cuando estaba en neo, lo acompañó Die.
Luego salio la placenta, tibia y me hizo sentir alivio.
Cuando volvió de neo pudimos volver a estar los tres juntos, conociéndonos, adaptándonos a todos los cambios.
Creo que sin dudas nos ayudaron muchísimo, nada hubiera sido igual sin eutonia y ustedes. Die pudo acompañarme muy bien y me tranquilizo que me recordara al oído lo que veníamos haciendo en las clases. Pude entregarme y conectar con lo que estaba sintiendo y haciendo, confiando en que iba a nacer de la mejor manera, de la que él y yo quisiéramos.
Valentín esta muy bien, le decimos las "O" cuando tiene cólicos y se calma así que muy pronto volveremos los tres para el toque eutónico.
Un agradecimiento muy grande a Frida y Eva por las enseñanzas, acompañamiento y el amor brindado.
Leti, Valentín y Die
Relato de Die
A las 9 a.m. me despierta Leti y me dice que hace 2 horas que está con contracciones. Hacía casi 10 días que estaba con contracciones irregulares e indoloras, pero estas eran regulares y dolían. Llamó a Rosana ( la partera), y quedamos en verla al mediodía en el sanatorio. En casa repetíamos la o con cada contracción, que cada vez eran más seguidas. En el auto también repetíamos la o.
Llegamos al sanatorio, sentí que tardamos mil años y ahí nos encontramos con Rosana que revisó a Leti. Salió y me contó que tenía 5 de dilatación, pero tenía muchas contracciones y la presión alta, por lo que la iba a internar.
En la internación repetíamos la o con las contracciones. A las 14 hs estaba con dilatación completa, pero Valentín no bajaba, estaba alto. Empezaron a decirle que pujará para hacerlo bajar, pero nada. Fue un momento difícil porque al pujar le decían a Leti que retenga el aire y cuando ella trataba de respirar mientras pujaba, le decían así no!! No hagas más fuerza porque ya no sirve.
Al rato la partera le dice a la obstetra que sigue alto ( nosotros decíamos la o, pero la partera nos dijo chicos son médicos y saben que si no baja por más que hagan la o...), entonces le dicen que intentan un rato más pero sino va a tener que ir a cesárea. En ese momento creo que conecté más que nunca con prolonga el coccix y soltá (yo sabía que Leti no quería cesárea ), al tercer prolonga el coccix Valentín se había encajado y después de 2 pujos más nació a las 15.57 hs del sábado 16 de marzo.
En ese momento lloramos tanto y Valen no lloró jajaja (habrá dicho estos ya lloran por los tres para que me voy a esforzar).
Frida por mi parte estoy agradecido porque gracias a lo aprendido en tus clases tuve las herramientas para acompañar a Leti y a la vez sentí que tenía un rol en ese lugar.
Hoy cada vez que Valen llora le decimos la o. No siempre le funciona a él, pero se calma bastante.
Leti, Valentín y Die